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Todos los
miércoles como de costumbre teníamos un ayuno en diferentes casas de los
hermanos, ya unos días antes nos habían dicho que teníamos que ir a migración el
miércoles a las 1 pm.  Bueno después del ayuno nos fuimos con Jose (patica
caliente) el que manejaba la guagua donde siempre andábamos.  Cuando
llegamos vimos que estaba cerrado y decía que abrían a las 3 pm, ósea que teníamos
que esperar dos horas sentados por que nos citaron a las 1.  Esperamos un poco y luego
llego uno de ellos, y nos pregunto que si somos los que ellos citaron y les
dijimos que si. 
 
Nos dijeron que pasáramos y nos sentáramos, estaban muy amables,
haciendo chistes y preguntas sarcásticamente.  Pero después de hablar un poco, el oficial nos
miro a todos y nos dijo: “ustedes ningunos están haciendo turismo, ustedes están
andando con los evangélicos predicando”
y nos dijo que andábamos con ellos en
los campos y asistiendo a la iglesia, y hasta a un concierto que asistimos en
la iglesia nos dijeron que estábamos, en fin todo lo que estábamos haciendo
ellos lo sabían TODO!  Nosotros nunca negamos nada, y le explicamos todo, ellos
dijeron que con visa de turista no podíamos andar con religiosos, ni asistir
siquiera a la iglesia.  Y que si ellos querían nos podían deportar o no dejarnos
entrar mas a dicho Pais.  Pero que no pasaba nada que hiciéramos turismo en los días que
nos quedaban y que no nos querían ver junto con religiosos ni nada que tenga
que ver.  En fin, fuimos prohibidos participar en cualquier ministerio. 
 
Pero gracias a Dios ya habíamos hecho la obra que El nos había encomendado.
Lo malo fue que no pudimos despedirnos de los hermanos, lo cual hicimos por teléfono.  El día
siguiente el teléfono no dejo de sonar, los hermanos llamando para pedir disculpa
por lo que paso por que se sentían mal por eso que nos paso en su país.  Bueno
los días restantes descansamos, hicimos un poco de “turismo”, y preparamos
algunas cosas que le íbamos a dejar a los hermanos.  Gracias a Dios que no paso
mas que un susto en migración. Dios siempre estuvo con nosotros y gracias por sus oraciones también.